Casi estás, falta poco, ya estás aquí, has llegado.
Vienes cargado de ilusión y aventuras por descubrir.
Vienes cargado de emociones por disfrutar.
Vienes tierno y limpio cargado de incertidumbre y miedo.
Vienes cargado de celos y de orgullo.
Vienes tras cinco años de espera y desazón.
Vienes a llenar un hueco lleno de ilusión.
Vienes querido y deseado, esperado y celebrado. Así vienes.
Verte ha supuesto el final de una espera imposible llena de incertidumbre y desilusión. Conocer tu historia, tu pequeña historia a través de las imágenes, ha generado aún mayor expectación y felicidad, y también ha desencadenado otros miedos y otras posibles aventuras.
Verte, indefenso y contento, sonriente y pillo, ha abierto multitud de ideas y de posibles afectos, y también de vida, de la inmensa vida que nos rodea a todos.
Vamos a buscarte. Sólo queda ahora abrazarte. Y quererte no, ya eres querido.
Para Lorenzo, Joaquín, Tere, y David.
